Desde las divisiones inferiores de la AMP, Mana Isozaki se proyectó como figura del fútbol del animé. De allí como estelar jugador de la valiosa y competitiva liga animé, hasta el sitio de hoy: una de las figuras que tiene el Campeón del Animé. Su juego está unido a un temperamento ganador. Para Mana Isozaki, la patrona, como la llaman la Preferencia Occidente y demás hinchas de Silent Möbius, jugar bien tiene una meta precisa: ganar.
Potente y buen tiro con una u otra pierna, por la cual no tiene problemas de perfil para definir, además de un excelente remate de cabeza. Condiciones esenciales para ubicarse en el área en el punto que desee. Serena y clara para definir o para el pasegol. Es completa en el área, y tiene grandes recursos para moverse fuera de ella siempre en función de ataque. Hiroshi Asamiya ha encontrado una dupla formidable y complementaria en Mana Isozaki y Rally Cheyenne, algunas veces con Rosa Cheyenne, Lebia Maverick o Jhonny Rivera. El resultado ha sido fulminante y se traduce en goles, en títulos. El fútbol de Silent Möbius que gusta y gana, fiel a una clásica tradición, seguida por el hermano de Kia Asamiya como estratega.
Volante, defensa o delantera, pues se mueve desde el medio al frente siempre en función de ataque, bien sea como creadora, definidora y volante armadora. Es generadora y definidora de gran rendimiento, da gusto verla actuar. Su fútbol es para ganar, como su mentalidad plasmada en la confianza antes del definitivo y difícil cotejo en Copa Futbolística 2006: "Ellos (Elfen Lied), son los que deben tener miedo. No habrá empate y estoy segura de que el 17 de noviembre (de 2006) será un día muy feliz para Sairento Mebiusu (Silent Möbius)", aseguró Mana Isozaki.
Y fue la jornada más gloriosa del fútbol del animé para Mana Isozaki, en importancia, emoción, significado. Con Mana Isozaki como máximo valor. Su presencia en Copa Merkosto 2007 garantiza el fútbol que más gusta: creación, ataque, y, sobre todo, gol.
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